Los esclavos negros que emigraron a Cuba mantuvieron inicialmente el culto de sus antiguos dioses, y también de sus costumbres y asociaciones, que a la larga dieron lugar a varios sistemas religiosos en los que reestructuraron sus creencias. Y así las prácticas religiosas de la cultura yoruba cristalizaron en un solo cuerpo litúrgico al que denominaron la Regla de Ocha o santería; las procedentes del Congo y Angola en la Regla de Palo o mayombe, y en forma parecida nacieron los preceptos religiosos de la sociedad secreta Abakuá, procedente de Nigeria; las casas de babalawos entre otros. ¡ DÉJAME AL MENOS UN ASHÉ ! 
